Los tonos ocres han teñido este mar de vides de nuestra D.O.Rueda. Y es que hoy emprendemos un nuevo viaje, esta vez por el viñedo. Un viaje por sus estaciones y lo que éstas nos traen y se llevan.

Este es el otoño, una estación que nos trae un silencio sólo revuelto por el viento y las hojas secas. A cambio éste se llevará el verdor de las cepas para dejar paso a los amarillos, ocres, dorados, e incluso rojizos, y los nuevos brotes no volverán hasta que llegue la subida de las temperaturas la próxima primavera. Nuestras variedades Verdejo y Sauvignon Blanc son las más tardías en realizarán este cambio de color, pero para cuando termine noviembre toda nuestra región se habrá vestido de otoño.

Pero todo tiene su tiempo. Cuando llegue diciembre la planta seguirá su ciclo y se despendrerá de sus hojas, dando paso a un nuevo ciclo fenológico, el letargo, dejando sus sarmientos al desnudo.

Comenzamos noviembre dando paso a una nueva estación y una nueva etapa en el viñedo. Aquí comienza un viaje desde el origen hacia una nueva añada.